11 mayo 2023
Paraninfo de la Universidad de Deusto
Deusto Law Alumni celebró el pasado 12 de mayo, con la presencia de más de 300 personas, el acto titulado “Formando a la abogacía del futuro”, en el que participaron los responsables de cuatro grandes firmas de abogados españolas: Fernando Vives Ruiz, presidente de Garrigues, Salvador Sánchez-Terán, socio director de Uría Menéndez; Javier Fontcuberta, director general de Cuatrecasas; e Iñigo Erlaiz, socio director de Gómez Acebo & Pombo.
Los ponentes conversaron en una mesa redonda, moderada por la decana de la Facultad de Derecho Gema Tomás, sobre diferentes materias relacionadas con la abogacía española y su futuro. Se analizaron cuestiones referentes a la calidad de la educación universitaria y la formación permanente de los abogados; la irrupción de la tecnología e IA; la globalización de los servicios jurídicos y los retos que supone; y, por último, la flexibilidad laboral y otras medidas de conciliación para garantizar la igualdad de oportunidades en el mundo de la abogacía.
En opinión de los grandes despachos, las instituciones universitarias han sabido adaptar sus programas de formación a los cambios y necesidades del mercado profesional, egresando graduados con habilidades no solo jurídicas, sino también transversales, pero de importancia en los grandes despachos, como por ejemplo saber trabajar en equipo o ser dinámicos a la hora de buscar soluciones creativas. Iñigo Erlaiz, del Gómez-Acebo y Pombo, contrapuso la situación actual a la que existía en el momento en que él mismo comenzó a ejercer.
Por otro lado, todos los directivos coincidieron en la importancia de mantener sus cursos de formación interna, principalmente, como dijo Javier Fontcuberta, de Cuatrecasas, para actualizar conocimientos y saber responder en cada momento a las necesidades de los clientes. Por su lado, Salvador Sánchez-Terán, de Uría Menéndez, destacó el papel fundamental de las universidades para inculcar en los estudiantes la pasión por el derecho y el amor hacia la abogacía. En su opinión, es “el mayor reto” al que se enfrentan las facultades de derecho, porque “si no somos capaces de transmitir esa pasión por el derecho, los estudiantes de dobles grados optarán por otras profesiones”.
En relación con las nuevas tecnologías y la IA, los responsables de las principales firmas legales se opusieron a la idea de que la IA pueda llegar a sustituir a los abogados. En palabras de Fernando Vives, de Garrigues, la abogacía es “algo más” que la mera gestión de información y para Iñigo Erlaiz, de Gómez-Acebo y Pombo, la abogacía también es “empatía”, lo que no puede ser sustituido por una IA.
Salvador Sánchez-Terán tranquilizó al alumnado asegurando que en su firma “jamás un algoritmo decidirá a quién se contrata y a quién no” en los procesos de selección. Con todo, también reconocieron las ventajas y beneficios que las nuevas tecnologías brindan a la abogacía, mejorando su eficiencia al reducir las labores repetitivas y de poco valor añadido.
Respecto a la globalización, los participantes reconocieron las fortalezas y “audacia” de la abogacía española, la cual cuenta con un gran reconocimiento en el extranjero. Todos ellos coincidieron en la idea de que los despachos españoles, además de competir con lealtad, se preocupan de cuidar a sus abogados, apoyándoles en su promoción profesional y brindándoles la oportunidad de tener experiencias en el extranjero. Los grandes despachos españoles, en definitiva, también son despachos internacionales con una gran presencia e impacto en el exterior.
En la última parte del debate, se destacó la complejidad que supone para los despachos buscar un equilibrio entre el ejercicio de la abogacía y la implementación de medidas de flexibilidad laboral y conciliación. Reconocen que se está trabajando en ello, buscándose diferentes alternativas, pero también son conscientes de la responsabilidad y sacrificios que exige la defensa de sus clientes.
No obstante, se mostraron esperanzados en que se encontrará dicho equilibrio: la pandemia demostró el éxito del teletrabajo y otras medidas de flexibilidad, y los grandes despachos han mejorado mucho en las últimas décadas. Es, por tanto, cuestión de tiempo que se alcancen todos estos objetivos que persigue el conjunto de la sociedad. En este sentido Fernando Vives, de Garrigues, puso énfasis en que fruto de la evolución de los últimos años, cada vez más mujeres llegan a la condición de socias.