14 mayo 2008
Campus Bilbao
“La trata de seres humanos, que durante siglos se configuró como una práctica legítima y socialmente aceptada, constituye en la actualidad una de las actividades ilícitas más lucrativas, junto con el tráfico de drogas y de armas”.
Es la fotografía que el profesor de Derecho Laboral de la Universidad de Deusto Javier Arrieta y la doctoranda Josune López exponen en un artículo de opinión publicado el domingo 11 de mayo en periódico El País a raíz de la noticia del desmantelamiento de una red dedicada a la explotación laboral de pakistaníes el pasado mes de marzo en Gipuzkoa.
Para ahondar en su análisis, Arrieta y López, se remiten a la historia. Al hilo de su cronología, se retrotraen a los tiempos de la abolición oficial de la trata de esclavos, que, según recuerdan “no ha sido óbice para que, en pleno siglo XXI, el comercio de seres humanos siga desarrollándose al margen de la legalidad en prácticamente todos los rincones del planeta”.
Su exposición también abunda en cifras, que se traducen en retos ineludibles: “En concreto, según las estimaciones de la ONU, este delito afecta a más de 2,4 millones de personas, por lo que su erradicación se ha convertido en uno de los principales desafíos para la Comunidad Internacional”.
Y ofrece una definición muy exacta del concepto sobre la explotación laboral: “A grandes rasgos, la trata de seres humanos implica la captación, el transporte, el traslado, la acogida o la recepción de personas, recurriendo a medios coercitivos, fraudulentos o abusivos, con fines de explotación. Es decir, esta práctica conforma un proceso multifacético cuyo fin último es la explotación de la persona…”.
Puedes consultar el artículo en su integridad en este enlace o en la publicación de El País.