El Instituto de Derechos Humanos y la Fundación Ellacuría dibujan el 'atlas de las religiones en Euskadi' en un nuevo libro sobre minorías religiosas

En la sede del Gobierno Vasco, el Director del Instituto de Derechos Humanos Eduardo Ruiz Vieytez presentó el pasado 23 de febrero en Rueda de Prensa el libro: Pluralidades latentes. Minorías religiosas en el País Vasco, una investigación realizada por un equipo pluridisciplinar de la Universidad de Deusto y la Fundación Ellacuría que dibuja el 'atlas de religiones' en Euskadi. En el encuentro con los periodistas, en el que participó la Consejera de Justicia y Administración Pública, Idoia Mendia, los responsables de la publicación acordaron realizar una nueva presentación el próximo 23 de marzo a las 19,00 horas en la sede de Ellacuria (Arrupe Etxea). En el acto público participará la directora de Derechos Humanos del Gobierno Vasco y el director de la Pluralismo y Convivencia, Fundación que colabora en esta publicación. Noticias

23 febrero 2011

Campus Bilbao


Los resultados del estudio constatan que en Euskadi conviven 214 comunidades religiosas diferentes. La mayor parte de estas comunidades se encuadran dentro del cristianismo reformado y evangélico, seguidas de lejos por los Testigos de Jehová, las comunidades musulmanas, las budistas y el cristianismo ortodoxo. Para los responsables del informe la diversidad religiosa "es un hecho". Al respecto, Eduardo Ruiz de Vyetez confirma que ha habido una considerable transformación del paisaje religioso que tenía esta sociedad y la dicotomía entre católicos o no es un fenómeno que se puede dar por definitivo e irreversible.

Ante este panorama, la consejera ve que la vasca 'es una sociedad plural en lo religioso', aunque también reconoce que el desconocimiento ha ocasionado una irregular respuesta por parte de las administraciones; si bien asuntos como el de la alimentación específica en los comedores escolares o los espacios habilitados para enterrar a personas de distintos credos han sido resueltos.

Y es que lejos de ser un problema, el Director del Instituto de Derechos Humanos Pedro Arrupe cree que la libertad religiosa "no es un factor de desintegración social sino todo lo contrario. Es un elemento cohesionador: un estadio sano, saludable, de una sociedad basada en la libertad. La diversidad nos enriquece?.

Sobre todos estos temas relacionados con la diversidad religiosa, la Universidad de Deusto está ultimando otra publicación, coordinada igualmente Eduardo Ruiz Vieytez.