12 febrero 2015
Campus Bilbao
La mesa comenzó con la explicación de Ignacio Berdugo en torno a la legitimidad del Derecho Penal en lo relativo a los delitos socioeconómicos, ámbito respecto del cual las viejas construcciones dogmáticas asentadas sobre los códigos penales del siglo XIX se han quedado obsoletas, lo que ha hecho necesaria una revisión de buena parte de la teoría del delito.
Precisamente, algunos de esos aspectos de la teoría del delito fueron analizados por el resto de ponentes de la mesa. Carlos Martínez-Buján abordó problemas relacionados con la autoría y la participación en los delitos socioeconómicos, caracterizados, entre otras cosas, por la implicación de diversos sujetos en la comisión de los mismos, lo que exige la ardua tarea de dirimir la responsabilidad de cada uno de ellos.
La profesora María Soledad Gil, por su parte, analizó la responsabilidad penal de las personas jurídicas, sintetizando los diversos modelos que existen al respecto, tratando de responder, a su vez, a las preguntas de por qué y cómo castigar a estos entes.
La segunda mesa se centró en el análisis de infracciones concretas. Intervinieron en esta mesa la catedrática de Derecho Penal de la Universidad Pública de Navarra, Inés Olaizola; la presidenta de la Autoridad Vasca de la Competencia y profesora titular de Derecho internacional privado de la Universidad de Deusto, Pilar Canedo; y la profesora de Derecho Penal, Demelsa Benito, también de Deusto. Las tres se centraron en el análisis de las prácticas corruptas y desleales que acontecen en el seno de las empresas.
La profesora Benito realizó una visión global de la corrupción en nuestros días, marcada por la influencia de la globalización, lo que hace que sus efectos sean mucho más destructivos que los de la corrupción clásica. Inés Olaizola, por su parte, se centró en la corrupción en la contratación pública prestando especial atención a las empresas que sobornan. En este sentido, expuso la dinámica de determinadas prácticas corruptas frecuentes en este ámbito y recordó que dos no se corrompen si uno no quiere, poniendo así de manifiesto que frente al funcionario que solicita un soborno, hay un empresario que acepta pagarlo.
Finalmente, la profesora Pilar Canedo analizó estás prácticas corruptas desde una perspectiva extrapenal, eminentemente administrativa, centrándose en las sanciones que existen en el Derecho de la competencia. A partir de la experiencia americana, puso de manifiesto algunas dificultades que plantea la sanción de estas prácticas, a la vez que señaló algunas soluciones jurídicas al respecto.
