23 septiembre 2015
Sede Madrid
La sede de Deusto Business School en Madrid acogió el 23 de septiembre el acto de presentación de Deusto Business Alumni, un acto que contó con la presencia del economista y especialista en relaciones internacionales Alan Stoga, Senior Adviser de Kissinger Associates. El estadounidense ofreció una conferencia en la que analizó el escenario político y económico a nivel mundial.
En la conferencia también participaron el presidente de Deusto Business Alumni, Agustín Garmendia y dos miembros de Deusto Business School, el presidente del Consejo de Deusto Business School, Alfredo Sáenz, y su director general Luc Theis, encargado de moderar el debate. No sin antes departir sobre la importancia que tiene la fusión de las cuatro alumnis anteriores (Alumni La Comercial, Alumni ESTE, Alumni DBS Executive y Alumni INSIDE). Un hecho sin precedentes que convierte a DBA en una potente escuela con más de 7.000 asociados. Una fusión que resulta esencial para el futuro de todos los estudiantes de grado, dobles grados y postgrados de Deusto Business School, perteneciente a la Universidad de Deusto, ya que esta anexión fortalece la Escuela de Negocios y eleva su nivel de excelencia.
Alan Stoga dio a los presentes una dosis de realidad de cómo se encuentra el mundo a nivel político y económico en estos momentos, argumentando a través de una fotografía que líderes como Merkel y Obama no están para sonreir. Stoga fue más pesismista con la situación que envuelve a Europa qué con la situación de las dos locomotoras que mueven el mundo, Estados Unidos y China. El ponente especializado en relaciones internacionales calificó la crisis migratoria como un problema sin solución.
Actualmente, la UE está negociando cómo repartir 120.000 refugiados cuando en lo que va de año ya son casi 500.000 los que han accedido a Europa a través de las costas griegas e italianas, una cifra que podría llegar al millón de refugiados a finales de año. "En Europa falta un líder que sea respetado, se trata de un proyecto a medias, los paises no piensan como un bloque," aseveró el consultor estratégico.
Ante la evolución que vive China, llamada a dominar el mundo en unos años, Stoga se mantuvo precavido. El país asiático no fue participe cuando se definió el mundo hace 70 años tras la Segunda Guerra Mundial, y ahora quiere escribir sus propias reglas advirtió: “El proceso de convertir a China en una economía de mercado es realmente complicado ya que el país asiático regresa a la economía de control cuando algo se tuerce. Un control que se extiende a la sociedad a través de prácticas militares y de seguridad informática, por qué si de algo ha sido capaz China es de bloquear internet, algo que parecía impensable,” manifestó Stoga. El país liderado por Xi Jinping está invirtiendo en infraestructuras para mejorar la presencia en los mercados occidentales y al mismo tiempo invierte en fuerzas aéreas y submarinos para apoyar a una de sus grandes fortalezas, el comercio marítimo. Con un único fin, ser la mayor potencia mundial.