Fui con dos expectativas: tener un foro de contraste de los temas que nos plantearán, con personas de otras profesiones y hacer nuevas relaciones. Tengo que decir que ambas se han cumplido.
Me acababa de jubilar. Tenía que llenar mi tiempo. Como mi vida profesional ha estado ligada al mundo educativo y cultural, creí que tener como referencia a la Universidad (en la que ya me había licenciado en su día) era lo más adecuado.
Me acerqué a buscar algún curso monográfico pero entre la oferta que se me presentó y la información que me dieron sobre el Titulado, me anime a cambiar mi idea.
A mi familia y amigos les pareció una buena propuesta. Ya conocían previamente, que por medio de cursos y otras actividades, iba a volver a la Universidad.
Tenía curiosidad por los compañeros que me encontraría, por el ambiente que se viviría, por los profesores y las relaciones con ellos, etc.
Las relaciones que se han establecido entre los compañeros han ido más lejos que lo que es compartir una clase. Ha sido lo mejor. Con los profesores, en general, la relación ha sido buena, cordial, respetuosa y muy cercana. Nos han ayudado en todo.
Entre las temáticas que más me han interesado están la música y también profundizar en los Derechos Humanos, que me ha suscitado nuevas inquietudes.
Los trabajos a realizar en grupo me han exigido mucho. Tener que compartir y llegar a acuerdos en su elaboración, cuando cada uno tiene sus propias ideas y forma de hacer, enriquece intelectual y personalmente. Son trabajos de mayor interés que los individuales. Con los individuales, seguimos en nuestra parcela, no cambiamos.
Personalmente, he valorado infinitamente manejarme en la biblioteca. Es un lujo la nueva biblioteca de Deusto. ¡Que diferente a la que tuve cuando estuve hace muchos años!¿