Pocos activos en la historia de la humanidad han transformado tanto la sociedad en un tiempo tan corto como lo han hecho las nuevas tecnologías e Internet en los últimos 10 años. Es evidente que las tecnologías de la información y las comunicaciones (TIC) se encuentran hoy en día inmersas en prácticamente cualquier ámbito de la sociedad y de la industria. Es difícil encontrar otra disciplina tan transversal.
El ritmo al que evolucionan todos aquellos sectores en los que tienen presencia las nuevas tecnologías es vertiginoso. Pero el ritmo al que ellas mismas evolucionan no lo es menos. La tecnología que hoy consideramos novedosa, es probable que en unos pocos años la consideremos obsoleta y sea reemplazada por otra. Por consiguiente, a tenor de su impacto y su constante cambio, la formación continua de profesionales competentes y con sentido de la responsabilidad que gobiernen la tecnología del futuro es un imperativo.
Durante los próximos años, tecnologías emergentes como Cloud Computing, la Internet del Futuro o las innumerables posibilidades que ofrecerán las siguientes generaciones de Smartphones, están llamadas a ser las protagonistas del próximo salto tecnológico. Y por consiguiente a aglutinar las mayores oportunidades de empleo y progresión profesional en el sector de la informática.
Por otra parte, en la coyuntura de crisis económica actual, donde el nivel de desempleo, aunque en mucha menor medida que a otros, está incluso afectando a sectores tradicionalmente tan activos como el de las TIC, la formación y el reciclaje en tecnologías punteras es una de las mejores inversiones que un profesional de la informática puede realizar.
|
---|